¿Para qué puedes usar la BZ140?
Quitar manchas de paredes y fachadas: con una limpieza a presión podrás quitar humedades y manchas de paredes exteriores, suelo de la terraza, garajes o fachadas simplemente utilizando la lanza y fuerza de agua apropiadas. Limpiar el suelo y paredes de una piscina: tanto si utilizas cobertores o enrolladores para tapar tu piscina en invierno, como si no, el fondo y las paredes acumulan suciedad incrustada debido a las largas temporadas que está sin uso. Con agua a presión podrás conseguir los mejores resultados para su correcta limpieza y, sobre todo, hacerlo de una manera simple y rápida. Lavar el coche, moto o bicicleta: este es uno de los usos más comunes y extendidos de hidrolimpiadora, ya que podrás dejar el exterior de tu vehículo impoluto cuando quieras, en muy poco tiempo y en tu propia casa. Regulando la presión y con el cepillo o lanza adecuado para superficies delicadas, tu automóvil lucirá brillante y como el primer día siempre que lo necesites, al tiempo que protegerás su chasis y carrocería externa. Limpiar las persianas: es cada vez más habitual emplear esta herramienta para limpiar las persianas de una vivienda. En ocasiones, esta tarea se convierte en algo complejo y laborioso debido a que son piezas que acumulan humedad y polvo durante largas temporadas que luego son difíciles de eliminar. Con una hidrolimpiadora y la lanza adecuada, quedarán como nuevas con facilidad en muy poco tiempo. Mantener y adecentar el jardín: con una hidrolimpiadora versátil como esta, limpiar vallas, piedras, objetos decorativos, caminos de jardín o la entrada a tu casa es muy fácil. Podrás arrancar los restos de humedad y suciedad incrustada de estos elementos.